El único, diverso y hermoso país de Túnez combina a la perfección el ambiente de un país costero mediterráneo con los detalles característicos de los países de África del Norte, lo que le convierte en un destino turístico distinto e inolvidable. Rodeado por el mar Mediterráneo y el desierto del Sáhara, Túnez tiene una impresionante costa, vastos bosques, ruinas de antiguas civilizaciones y extensos terrenos repletos de arena del desierto que se adentran en África.
En la costa noreste se encuentra la capital, Túnez. Aquí podrás ver las huellas del pasado otomano de la ciudad y de la invasión colonial. Aunque en la actualidad Túnez se ha reinventado y es una ciudad árabe moderna y elegante con mucho que ofrecer. Es una exótica mezcla de la cultura islámica y las europeas.
Muchos de los turistas que vienen aquí lo hacen para disfrutar de sus espléndidas playas y de su envidiable clima, pero cada vez más gente se está dando cuenta que este país del norte de África tiene mucho más que ofrecer además de su costa y sus playas.
Qué hacer en Túnez
Sus playas de lujo son un atractivo evidente para cualquier turista y, sin duda, merece la penad disfrutar de al menos un día en la costa, tomando el sol y degustando sus mariscos. La isla de Djerba es una estupenda manera de disfrutar de todo esto pues se trata de una pequeña isla, que cuenta además con mercados que ofrecen artesanía, calas, tiendas y restaurantes.
A todos los que os encandile la cultura podréis satisfaceros en la capital, donde encontraréis un ambiente único y una fusión entre las culturas más tradicionales y las más modernas. Aquí verás perfectamente combinado callejones oscuros junto a grandes avenidas de estilo francés con cafés, además de todo tipo de actividades culturales para disfrutar en la ciudad. No puedes irte de Túnez sin haber visitado un Hamman (el baño turco) y la capital es el lugar idóneo para visitar uno. Como opción alternativa puedes visitar Sidi Bou Saïd, una ciudad cercana con mucha cultura y una playa.
No hay que olvidarse de los amantes de la naturaleza que también encontrarán su rincón en este país, pues tienen muchas opciones diferentes para disfrutar. El lago Ichkeul es Patrimonio de la Humanidad y está situado en el norte. Es un lugar muy popular donde podrás ver miles de aves migratorias y disfrutar de unas vistas espectaculares. Viajar en camello por el Sahara es también una experiencia única que puedes disfrutar en Túnez.
Qué comer
La cocina tunecina es una interesante mezcla entre los sabores de los platos mediterráneos, franceses y de Oriente Medio. Esto da lugar a un saber muy distintivo y único que muchos encuentran delicioso. Por lo general los platos están condimentados con una buena cantidad de hierbas y especias.
El Harissa es la elaboración tunecina más común y es seguro que lo encontrarás en más de una ocasión durante tu estancia. Esta salsa picante a base de ajo, aceite de oliva y pimientos picantes rojos se sirve muy a menudo como acompañamiento.
El cuscús es otro de los acompañamientos estrella en Túnez y a menudo se sirve con cordero, pimientos, zanahorias y harissa. Otro plato muy popular es el Ojja, que es un guisado picante de salchichas con aceite de oliva, harissa, huevos, tomates, pimiento y ajo.
Los postres tradicionales tunecinos se elaboran mezclando miel, nueces y frutas para conseguir un pastel muy consumido. Los más golosos se van a encontrar en el paraíso en este país pues se elaboran gran cantidad de dulces y pasteles típicos de Oriente Medio y de la herencia que dejó el dominio francés.
Clima
El fantástico clima es uno de los principales atractivos del país. Es una combinación entre el clima mediterráneo y el africano, asegurándonos que tendremos unos veranos cálidos y largos en cualquier zona del país.
Al sur del país, en el desierto, solo existen dos estaciones: largos veranos seguidos de una corta temporada de lluvias. Esta es la parte más cálida de Túnez con temperaturas que pueden llegar hasta los 45º centígrados. Al norte de este lugar sí podrás encontrar estaciones más frescas que se corresponden con la primavera y el otoño pero estas son notablemente más cortas que en Europa.
Puesto que el sol brilla prácticamente todo el tiempo y la lluvia es escasa, advertimos de que las temperaturas pueden ser extremas. Como consecuencia es vital que tomes las medidas adecuadas para protegerte del sol en cualquier época del año.
Cómo llegar a Túnez
El Aeropuerto Internacional de Túnez-Cartago es el principal aeropuerto tunecino y aquí aterrizan vuelos regulares desde la mayoría de las principales ciudades europeas. Se encuentra a sólo 7 km de la capital. Si bien esta es la mejor opción, el Aeropuerto Internacional de Monastir-Habib Bourguiba también se puede utilizar.
Alternativamente, se puede acceder a Túnez por mar desde un número determinado de puerto europeo. Muchos cruceros mediterráneos se detienen en el puerto de Túnez, La Goleta como parte de su itinerario a lo largo de la costa.
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Lo que no te puedes perder en Túnez
- Anfiteatro de El Djem -Tal vez este es el lugar de interés más conocido de Túnez. El Djem es un gigantesco anfiteatro del siglo III que ha sido catalogado como Patrimonio de la Humanidad. Ha sido excelentemente conservado permitiendo a los visitantes caminar por todos los niveles y explorar la zona subterránea que está prácticamente intacta, y es donde los gladiadores esperaban su turno. Su modelo está inspirado en el Coliseo de Roma y es el anfiteatro más grande del norte de África. Tenía una capacidad para 35000 espectadores.
- Dougga – Esta antigua ciudad es Patrimonio de la Humanidad y se encuentra en el noroeste de Túnez, Dougga contiene algunas de las ruinas mejor conservadas de África del Norte. La mayoría de estas son de época romana, pero la ciudad se remonta al siglo VI a.C. Aquí se pueden ver templos, un teatro y un impresionante monumento. Esta es una de las principales atracciones turísticas de Túnez.
- Medina de Túnez – En este lugar, Patrimonio de la Humanidad se combina la historia y la cultura del país. Es el epicentro de la ciudad de Túnez; un grupo de callejuelas y pasadizos cubiertos con activos centros del comercio y trueque con productos en oferta que van desde elaboraciones artesanas, marroquinerías hasta productos de plástico. Aquí también podrás encontrar algunos monumentos de interés como el Torbet el Bey o la Mezquita Zitouna que se sitúan muy cerca.
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