Malia enamora. Motivos para ello no faltan. El primero es su magnífica ubicación: situada en la franja litoral del noreste de la isla de Creta. El segundo: su animada vida nocturna que, junto a sus excelentes playas, es la razón principal por la que hasta aquí se desplazan centenas de jóvenes. El tercero, y quizás el más distintivo, son los ancestrales tesoros que esta ciudad de historia milenaria aún regenta, algunos de años pertenecientes al año 2000 a. C.
¿Estás dispuesto a perderte todas las joyas que Malia te ofrece? Seguro que no… Ve buscando hueco en tu agenda, ¡ya tienes destino para tu próximo viaje!
Recorre su centro histórico y conoce la esencia de Malia
A pesar de que los tesoros más visitados no se sitúan en el centro de la ciudad, aquí también encontrarás otros que, por supuesto, no debes dejar de ver. Resulta todo un reto recorrer las calles estrechas del casco histórico de Malia, que integran este particular laberinto.
Una buena idea es comenzar visitando la iglesia de Agios Nektarios. Se trata de un templo ortodoxo, con una impactante decoración interior. ¡Te encantará su gran lámpara de cristal! Debes saber que los paneles están decorados por Michael Vassilakis. Por supuesto, esta no es la única que debes visitar.
Muy próxima a la anterior se sitúa Agios Ioannis, que posee estilo bizantino, pero excesivamente sobrio. Quizás te resulte más hermosa la iglesia de Dimitrios, de estilo más moderno, pues fue construida a finales del siglo XIX en la que consideran una de las plazas más bellas de toda Malia.
Visita el yacimiento arqueológico y todos los tesoros que custodia
Sin duda, hacemos referencia a un importante asentamiento minoico, situado en un espectacular escenario: frente al mar Egeo, y muy próximo a las montañas de Lasithi. Fue descubierto como resultado de las excavaciones realizadas por el arqueólogo J. Hazidakis.
Posee una amplia superficie, pues se extiende a lo largo de 7.000 metros cuadrados. Está distribuido, tal cual, lo estaría cualquier ciudad actual. En este podrás apreciar antiguos edificios, algunos se remontan al año 1450 a. C. Estos restos dejan entrever la grandeza que, en un pasado, llegó a alcanzar esta ciudad política y económicamente. Un prestigio otorgado por su magnífica ubicación entre tres continentes (Europa, Asia y África), que la consagraron como un importante puerto así como centro comercial.
El resto de edificaciones fueron destruidas en un terremoto, o tras algún conflicto bélico. Hay dos zonas que en este yacimiento destacan por encima de las demás.
Barrio Mu
Compuesto por algunas viviendas y, también, por edificios públicos de gran antigüedad, entre los que han aparecido textos escritos en jeroglífico.
Palacio minoico
Se trata de la verdadera huella identitaria de Malia. Este es uno de los palacios más antiguos que acoge Creta, y el tercero más grande de toda la isla. Los expertos afirman que este posee 4.000 años de antigüedad. Aquí llegó a vivir Sarpedón, hermano del rey Minos.
Esta edificación está construida en piedra, y ese es el motivo por el que presenta irregularidades en su fachada externa. De esta ya solo quedan restos, pero revelan la grandiosidad de su pasado minoico y todas las joyas que este majestuoso recinto custodiaba. Entre las excavaciones realizadas en el recinto aparecieron unos colgantes de oro, conocidos como las abejas de Malia. Su valor es incalculable y, hoy por hoy, forman parte del conocido como Tesoro de Egina.
Esta monumental construcción gira en torno a su patio central. No te prives de dar un pase por él y observar sus auténticos adoquines. Sitúate en su parte central. A la derecha encontrarás sus almacenes, así como su tesoro religioso. Y, en su parte oeste, podrás apreciar el Kernos, el monumento más famoso. Antiguamente esta construcción de piedra era utiliza para realizar un ritual a los dioses, a través del que se le ofrecían las primeras cosechas de la temporada. Y, para ello, nada mejor que hacerlo desde el altar, fácilmente localizable desde el patio.
Cómo llegar a Malia
Te desplazarás hasta la isla griega de Creta en avión, aterrizarás en el aeropuerto de Heraclión. Situado en su capital, a 31,5 kilómetros de tu destino.
Tu trayecto se prolongará durante casi media hora hasta tu alojamiento en Malia. No sumes tiempos necesarios, contrata los servicios de una empresa de traslados que te desplace de manera directa a tu apartamento u hotel.
Dónde alojarse
Aegean Sky Hotel-Suites (***), Malia: Durante tu estancia aquí, podrás elegir hospedarte en alguno de sus estudios o apartamentos. El complejo se sitúa muy próximo a la playa, y ofrece múltiples servicios de los que podrás beneficiarte. Sumérgete en su piscina, prueba las delicias locales que ofrece su restaurante especializado en cocina griega.
Malia Studios Hotel-Apartments (**): Ubicado a dos minutos a pie de playa. ¡Te encantará este establecimiento! Ofrece la tradicional estructura cretense. Los huéspedes podrán acceder a cada una de sus dos piscinas, y probar las exquisiteces que ofrece su bar. Benefíciate de los servicios de Wi-Fi y de aparcamiento, ambos sin coste adicional.
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