Polonia es un país con una historia profundamente arraigada en el pasado de la cual se nutre para construir su sociedad contemporánea de la que emana una energía y vitalidad excepcionales y que está abanderada por las principales ciudades del país. Pisando las calles de sus ciudades podrás disfrutar de la yuxtaposición de distintas épocas como el Renacimiento, el Barroco o el Art Nouveau que tienen su máxima expresión en ciudades como Cracovia junto con el gótico y el medievo del que hacen gala algunas ciudades con el paisaje natural como telón de fondo para disfrutar del senderismo, el ciclismo o el piragüismo. El turismo ha sido uno de los motivos principales para el resurgimiento del país.
Qué hacer en Polonia
Lejos de las extensiones de ciudades como Varsovia, Cracovia y Gdansk, podemos encontrar enormes paisajes de bosques vírgenes, ríos y montañas que junto con la costa báltica son paisajes de una gran belleza.
Las actividades al aire libre son accesibles gracias a una amplia red de senderos que se adentran en las montañas. En el extremo sur del país, el terreno accidentado de los montes Cárpatos se presta para actividades como el ciclismo o el senderismo, mientras que en el noroeste, las aguas cristalinas de los Grandes Lagos de Masuria, ofrecen la oportunidad de realizar múltiples actividades en el agua, como navegar en kayak o en canoa. Visitar las cuevas de la zona de las llanuras de Kraków-Częstochowa situada entre las ciudades de Cracovia, Czestochowa y Wieluń es una buena idea para poder explorar la diversidad del país.
Pero en este país también hay un hueco para los aficionados a la historia. Polonia tiene una cuidada herencia que se remonta al año 1000 y en la que podrás ahondar fácilmente. Varsovia tuvo que ser reconstruida, prácticamente desde cero después de la Segunda Guerra Mundial pero podrás encontrar las huellas del pasado en sus edificios de arquitectura soviética, sus museos y el espíritu positivo de sus gentes. La antigua capital de Polinia, Cracovia, tiene una historia muy diferente. Ha sido designada Patrimonio de la Humanidad por mantener exquisitamente conservada su arquitectura gótica y renacentista, con una belleza tan insuperable que los soldados nacis decidieron mantenerla intacta.
Qué comer
La mejor forma de definir la comida polaca es como abundante y casera, con mucha influencia de la gastronomía eslava, rusa, austriaca y alemana. Las verduras como el repollo, la remolacha, las setas y las cebollas son ingredientes básicos y la carne de cerdo es una de las principales carnes en los menús junto con la de pollo y la ternera.
Un de los platos más típico de Polonia son los Pierogi, una pasta rellena de diferentes tipos de vegetales que se asemeja a una empanadilla. El Barszcz o Borscht es una sopa de verduras que incluye, normalmente, raíces de remolacha que es lo que le otorga ese rojo intenso característico. Otro plato típico son las Kielbasa, las salchichas polacas que se elaboran de dos formas: normal o seca.
El clima
Polonia tiene un clima templado de transición lo que significa que goza de dos zonas climáticas diferentes que están influenciadas por las corrientes oceánicas y polares.
La época más acertada para viajar a Polonia son los meses comprendidos entre mayo y septiembre. Las temperaturas medias en los meses de junio y julio pueden oscilar entre los 20 ºC y los 25 ºC. Los meses de invierno, principalmente entre los meses de noviembre y febrero, las temperaturas son bastante bajas, pudiendo tener valores comprendidos entre los 0 y los -5 ºC. Sin embargo, los aficionados al esquí, encontrar en el periodo previo a Navidad la época idónea para viajar hasta allí.
Cómo llegar a Polonia
El viaje a Polonia desde España dura unas tres horas en avión y compañías aéreas como Ryanair o Norwegian ofrecen vuelos directos desde distintos aeropuertos españoles a los aeropuertos de Varsovia Chopin o Warszawa-Modlin. También dispones de vuelos hasta otros aeropuertos más pequeños del país como Cracovia, Gdansk, Poznan o Wroclaw. Antes de viajar te recomendamos que reserves un traslado hasta tu alojamiento con Shuttle Direct y de esta forma puedas disfrutar con total tranquilidad de tu viaje.
Si has pensado en viajar en tres hasta Polonia, tienes trenes directos desde distintos países de Europa central como Alemania, la República Checa o Eslovaquia. Desde la estación de tren también dispones de un servicio de traslado que te lleve hasta tu alojamiento.
Para todos lo que vayáis a visitar Polonia en un crucero, los puertos de Gdansk o de Gydnia son los más habituales para las paradas de los barcos. Gdansk es también el principal puerto donde se ubican los ferris con destino a los distintos puntos del Báltico.
Lo que no puedes perderte en Polonia
Auschwitz-Birkenau (Oswiecim-Birkenau), en las afueras de Cracovia, es el campo de concentración de la Segunda Mundial que recuerda a las víctimas del Holocausto y que muestra la barbarie para evitar que se vuelva a producir.
El Parque Nacional de Bialowieza es el parque nacional más antiguo del país y también el hogar del último bisonte europeo que queda. El frondoso bosque del parque tiene árboles que cuentan con más de 500 años de antigüedad y algunos de los mejores senderos naturales.
La casa de campo de Chopin. Situada en las afueras de Varsovia, esta casa se puede visitar si estás interesado en la obra y vida del compositor e intérprete musical más importante del país.
Sobre Shuttle Direct
Shuttle Direct es el proveedor de servicios de traslados de Polonia, el resto de Europa y el norte de África. Reservar con antelación un traslado desde el aeropuerto hasta tu alojamiento es una gran idea para viajar seguro y rápido. Las reservas se hacen mediante la plataforma segura de nuestra web y nuestros conductores estarán esperándote a tu llegada.